DECÁLOGO DE LAS COMUNICACIONES EFECTIVAS EN LAS ORGANIZACIONES
Un aporte para humanizar las comunicaciones, porque la comunicación crea relaciones y vínculos en los diversos ámbitos de nuestra vida.
" Cuando se forma en nuestro interior sinceridad pura,ella se percibe en el exterior en el corazón de otras personas." Lao-tse El Decálogo de las Comunicaciones es un documento elaborado por un equipo de profesionales del área de Recursos Humanos representantes de varias Empresas y Organizaciones de la Quinta Región del país, invitados por la Facultad de Psicología de la Universidad Adolfo Ibáñez con la intención de crear un espacio académico y de investigación. Este es el fruto de un grupo profesional que acudió a nuestro llamado y dedicó un importante tiempo de su jornada durante el presente año para estudiar e investigar el apasionante tema de la comunicación en las organizaciones. La comunicación como fenómeno humano es una interacción poderosa que estando disponible para todas las personas de una sociedad, no siempre es usada por nosotros en la actividad social en toda su potencialidad y menos aún en su calidad y efectividad cotidiana en la vida laboral. No es usada como un instrumento disponible, porque a veces no estamos conscientes que al saludar o al solicitar algo a otra persona de la organización "nos estamos comunicando". No es usada cuando no agradecemos la puntualidad y la impecabilidad de un documento que habíamos pedido con urgencia o sin ella, no es usada cuando felicitamos a alguien por una acción destacada e insinuamos que podría haber sido mejor, no es usada cuando estamos serios al saludar o estamos risueños al corregir la conducta de un colaborador.
Podemos usar la comunicación como un instrumento poderoso si en cambio, escucháramos más a nuestros colaboradores, si le expresáramos nuestro verdadero parecer en un tema determinado, si, en fin, le diéramos espacio abierto a la creatividad y las emociones que contiene nuestra comunicación, y al desarrollar como un hábito el diferenciar los hechos ocurridos en el ámbito organizacional de aquellos juicios que circulan por el ambiente. Podríamos usar nuestra comunicación más y mejor si nos diéramos cuenta que detrás de cada conversación, de cada acción exitosa o no exitosa, hay una persona semejante a nosotros, que siente y piensa como nosotros, que se emociona y se entusiasma, igual como nos sucede a todos por el sólo hecho de ser personas.
De allí que el presente DECÁLOGO sea una propuesta nada más, un conjunto de sugerencias, ya que no pretende ser un listado de prohibiciones o indicaciones que morirían en el intento si es que no logran recordarnos que tal vez lo podríamos hacer diferente en la próxima ocasión, si es que tal vez pudiera darnos una luz para abordar un asunto tan humano como es la comunicación, un asunto que si tratamos con delicadeza, con claridad y destreza puede darnos un fruto tan diferente, en la relación con nuestros compañeros de trabajo, con nuestros colaboradores y clientes.
Cada sugerencia o frase del Decálogo posee una consecuente explicación en esta Guía que pretende darle sentido a lo que se "ha querido decir", ya que en comunicación, así como en ninguna otras esfera de lo humano, ninguna cosa es como parecer ser, ni existe una relación matemática entre hechos e interpretaciones, muy por el contrario, entre lo que se dice y lo que se quiere decir, entre lo que se siente y se hace existe un tremendo e involuntario abismo.
El Arte de la comunicación nos enseña a hacer más cercano a estos grandes territorios conocidos como sentir, querer decir y finalmente decir en la acción.Siendo este un primer intento por hacer un aporte y una presencia de nuestra Escuela de Psicología en la Quinta Región, proyectamos para el futuro distintas publicaciones que acerquen el quehacer académico con el acontecer organizacional, asumiendo que el practicar una comunicación verdadera es tan difícil para profesores como para alumnos, tan difícil como lo es entre jefes y colaboradores, entre padres e hijos, de modo que ante este preciado y difícil Arte de comunicar nos declaramos todos aprendices de una sabiduría que nace junto con el ser humano.Edgardo RiverosPsicólogo, DocenteUniversidad Adolfo Ibáñez
CREACION: Grupo de Estudios de Recursos Humanos - UAI 2005
